Fascitis plantar. ¿Cómo se puede tratar?

La fascitis plantar es una de las causas más frecuentes de dolor de forma aguda en la zona del tobillo o pie, de origen no traumático. Se suele presentar en mujeres entre 40 y 70 años o en pacientes más jóvenes y deportistas. 

A continuación, te contamos en que consiste, para que puedas conocerlo mejor y estar al tanto ante la aparición de sus síntomas.

¿Qué es la fascitis plantar?

Se denomina fascitis plantar al dolor de la planta del pie en la zona cercana al talón. Es una de las afecciones del pie más frecuentes en la consulta. 

Es un dolor al que debemos prestar especial atención, ya que comienza en forma de molestia progresiva y difusa en la zona de la planta del pie o tobillo. Se suele ir agudizando poco a poco y al cabo del tiempo puede llegar a ser muy incapacitante.

Por ello, debemos acudir lo más pronto posible al fisioterapeuta, quien hará una valoración y llevará a cabo el tratamiento más adecuado en tu caso.

Para entenderlo mejor, debemos saber que la fascia plantar hace referencia a un tejido fibroso que va desde el talón – a lo que anatómicamente se denomina calcáneo- hasta la zona de los dedos del pie – o metatarso. Esta estructura es responsable de mantener la forma arqueada de la planta del pie y repartir la energía entre los diferentes huesos y ligamentos a la hora de caminar.

¿Cómo saber si tengo una fascitis plantar?

Como norma general, existen unos síntomas que son especialmente característicos de esta lesión, y nos pueden alertar para acudir a un especialista. 

  • Dolor intenso y localizado en el talón al dar los primeros pasos cuando nos levantamos por la mañana o después de estar cierto tiempo sentados.
  • Este dolor suele empeorar al estar de pie o caminar de manera prolongada.
  • También notaremos un agravamiento de los síntomas al realizar deporte o cargar peso. 

Aún así, debemos consultar con nuestro fisioterapeuta o médico ya que las manifestaciones pueden ser muy diferentes según las características individuales de cada persona, el momento del diagnóstico, la edad…

¿Cuál es el origen del dolor en la planta del pie?

Recordando la anatomía, esta lesión se produce por un exceso de carga y tensión a nivel de la inserción de la fascia plantar en el calcáneo, lo que provoca microrroturas en esta estructura y en consecuencia, una degeneración del tejido.

Se considera que hay múltiples factores que predisponen a que se desarrolle una fascitis plantar. Sin embargo, no debemos alarmarnos, ya que suele ser el conjunto de varios de ellos lo que determina que se desarrolle la lesión.

  • Personas que realizan deporte, en especial, corredores.
  • Uso de calzado inadecuado.
  • Personas que trabajan mucho tiempo de pie o cargando peso.
  • Caminar mucho tiempo sobre superficies irregulares.
  • Que el arco del pie esté muy aumentado o disminuido, es decir, pie excesivamente plano o cavo.
  • Aumento de peso.
  • Edad avanzada.
  • Alteraciones en la marcha.
  • Falta de elasticidad en la musculatura del gemelo y tendón de Aquiles.
  • Puede afectar hasta un 15 % de la población general que acuden a la consulta de Atención Primaria y a un 8% de población deportista.

Estos factores de riesgo y formas de tratamiento tienen amplia evidencia científica reciente, de lo cual incluimos este artículo para los más curiosos.

¿Qué tratamiento se utiliza en la fascitis plantar?

El tratamiento de primera elección del dolor plantar es el conservador, es decir, se desaconseja la intervención quirúrgica o las infiltraciones de corticoides (cuyo efecto a largo plazo puede provocar degeneración del tejido), al menos de manera inicial y hasta ver la evolución que está teniendo tu caso.

¿Qué podemos hacer en la Clínica de Fisioterapia RECUPERATE para ayudarte?

En primer lugar, la ecografía ayuda a confirmar el diagnóstico, y muestra una imagen del grado de evolución en tu caso, que es la mejor manera de poder individualizar el tratamiento. Además, sirve como guía para llevar a cabo el tratamiento con electrolisis percutánea ecoguiada o EPI

Otro de los pilares en los que basamos el tratamiento son las ondas de choque focales, que junto con la aplicación de INDIBA® o diatermia,  estiramientos y la intervención con otras técnicas del fisioterapeuta va a ayudar a que la inflamación y el dolor disminuyan. El tratamiento del espolón calcáneo con ondas de choque suele ser fundamental para una pronta recuperación de la fascitis.

Este tratamiento de la fascitis plantar con ondas de choque en Salamanca no es único en nuestra clínica, pero sí que con un uso adecuado como realizamos, los resultados son espectaculares.

Este estudio trata la evidencia científica de la efectividad de los diferentes tratamientos en la fascitis plantar.

Por último, y como parte de un tratamiento multidisciplinar, nuestros profesionales se encargarán de aconsejarte el uso de plantillas, si ello puede ayudar a repartir las cargas del pie y ayudar a la recuperación de tu lesión.

Si llevas un tiempo notando este tipo de molestias en el pie, no des un paso en falso y ponte en contacto con nosotros; nuestros profesionales revisarán tu caso. La individualización es imprescindible para recuperarte lo más rápido posible.

La fascitis plantar es una afección común que causa dolor en el talón y la planta del pie. Se caracteriza por la inflamación del tejido fibroso conocido como fascia plantar, que se extiende desde el talón hasta los dedos del pie. Diversas afecciones pueden desencadenar esta condición dolorosa, y es fundamental comprender sus causas para abordarla de manera efectiva.

Una de las principales afecciones que provocan fascitis plantar es la contractura muscular en la pantorrilla. Esta contractura puede aumentar la tensión en la fascia plantar, incrementando el riesgo de inflamación y dolor. La falta de flexibilidad en los músculos de la pantorrilla, así como en el tendón de Aquiles, suele contribuir significativamente al desarrollo de la fascitis plantar.

La fisioterapia deportiva en Salamanca ofrece un enfoque integral para tratar la fascitis plantar. Los fisioterapeutas especializados en este campo utilizan técnicas avanzadas para aliviar el dolor y reducir la inflamación. A través de la fisioterapia, se pueden realizar estiramientos y ejercicios específicos que mejoran la flexibilidad y la fuerza de la fascia plantar y los músculos circundantes. Además, la terapia manual y el masaje profundo son herramientas efectivas para liberar la tensión y mejorar la circulación en el área afectada.

Recibir atención médica adecuada de manos del fisioterapeuta es esencial para manejar la fascitis plantar. Los profesionales de la salud pueden diagnosticar la condición con precisión y recomendar un plan de tratamiento personalizado. Esto puede incluir desde medicamentos antiinflamatorios hasta el uso de plantillas ortopédicas para proporcionar soporte adicional al pie.

Los ejercicios juegan un papel crucial en el tratamiento de la fascitis plantar. Ejercicios de estiramiento, como estirar la fascia plantar y los músculos de la pantorrilla, ayudan a aliviar la tensión acumulada. Fortalecer los músculos del pie y la pierna también puede prevenir futuras lesiones. Los ejercicios específicos, como los levantamientos de talón y los estiramientos de la fascia plantar, son recomendados por los fisioterapeutas para promover la recuperación y evitar la recurrencia del dolor.